Primero hay que aclarar que antes de dormir con los amigos en la residencia, se comio lo que se podrían llamar arepas de verdad; se debería obligar a cada dueño de restaurante antioqueño a visitar venezuela para que vean como es una arepa, para que así aprendan que un carton insaboro de maiz con mantequilla y sal o hasta de pronto queso no sabe a nada. Los de acá si saben a algo, son arepas en la forma costeña rellenas con de todo, buenisimas.
Saliendonos del tema culinario, volvemos a lo priemro, y que es lo primero? cambiarnos de hotel, como no! Puerto Ordaz no es turístico, acá no hay hostales, lo que se debe buscar es un hotel, afortunadamente son baratos. Si lo hubiera visto antes.. el hotel estaba a cuadra y media de la residencia.
Ya instalados hay que hacer algo urgente, buscar plata. Ya se sabe que con la que hay no se llega a colombia, pero… para tarjetas del exterior los bancos venezolanos no funcionan, así de simple; despues de ensayar todos los cajeros se llegó a la conclusión de que no iba a ser posible. Varias filas dentro del banco para hablar con gerentes y preguntar como hace un turista extragero para sacar dinero en venezuela, la respuesta fue, una patada en el culo. Resulte que la simpatía venezolana se acba en la entrada a un banco, ahí si son de verdad antipáticos.
Nada que hacer, ahora tocará empezar a comer menos y dormir en residencias como la de anoche para poder llegar a cucuta, o… empezar a escribir y llamar gente para ver como se sale del proble.
Por la noche al ver el mail resultó que todo se ha solucionado, Pablo, donde trabajé en Buenos Aires, tiene a su hermano y un socio viviendo en Puerto Ordaz, si, justo en la ciudad donde me di cuenta que estaba jodido. En una amabilidad enorme y una gran confianza, Domingo me dió suficiente dinero para poder salir de venezuela despues de canaima.
Mil gracias a Domingo y a Pablo por la ayuda!