Y comienza la cuarta y última parte del viaje!

En una caja de cartón, empacada en otras bolsas y como no, todas rasgadas como si hubieran pasado por una aduana, llegó un lindo carburador; bueno, lindo no se, todo es relativo, me imagino que el ingeniero que lo diseño lo debe encontrar una preciosura; yo por mi parte creo que es feo, pero como es mio y nuevo, le cambio su adjetivo para el otro opuesto dado que sin él, la moto, a la cual nunca le pusimos nombre, podría llegar a colombia por sus propios medios.

El patrocinio, proveniente de federico salva al motoneto de muchos problemas futuros, mil gracias por el regalito!
Y asi, se le puso en veyron en cachambe, se hizo una pruebita de consumo fuerza y velocidad rodeando toda la bahia de guanabara, unos 150kms y se puede decir que si, se logró el objetivo. La moto esta consumiendo en los rangos aceptables, corre a la máxima velocidad y tiene fuerza suficiente para pasarse a los carros y además, perdió esa manía tan fastidiosa que tenía de necesitar diez minutos para mover la llanta de atras cuando estaba fría.
Con moto con su corazón bueno, aunque la carcaza medio aporreada y el motoneto completico, se comenzará este sabado la cuarta y última parte del viaje, es decir, el norte de brasil, venezuela y la llegada a colombia. La idea es la misma de siempre: hacer todo el litoral atlantico hasta belem, ahí tomar una barca por el amazonas hasta manaus y de allí salir para venezuela donde se tienen 3 rutas alternativas. Una despues de canaima para llegar a los llanos orientales, otra por el norte llegando despues a cucuta y otra para llegar a maracaibo y entrar por maicao; cuando esté en venezuela se verá.
Lo triste de esta tercera parte es que como tengo tiempo de salida de brasil y el plazo es mas bien poco, no se contará con casi flexibilidad y será mas bien un paseo tipo japones, es decir, llegar, tomar la foto y seguir. Aun así se tendra los días necesarios para hacer la chapada diamantina, jericoacoara, lençois maranhenses y alter do chão con suficientes días para hacer las trilhas con toda la calma del mundo, bueno, exagero, pero por lo menos para que estas partes no sean vistas en un segundo.
Esta vez el calculo son alrededor de unos 10.000 kilometros con toda la esperanza de que pasen cosas bien raras para ponerlas en el blog y pasar bien bueno, vomo no!
Entonces, quienes ya estaban aburridos con mis descripciones citadinas, ya pueden volver al blog que lo que sigue es viaje.