Día 237 – 238 Flona – Bitácora del Motoneto

Después de 3 días y medio en barco, lo mejor fue hacer otras 3 horas en barco para ir al canal de jarí, mas otras 2 en el canal, mas otras tres para volver. Así pareciendo que estar todo el día en un barco es un buen prospecto, se tomó otra vez un barco para ir a Flona que es en otras palabras la selva protegida mas cercana a Alter do chão. Para llegar a una ranchería o comunidad como las llaman acá tomó unas 3 horas y media. Una vez allá y almorzados en la casa de Bata, nuestro guía, lanchero y hospedero, salimos para la selva. Una caminada de unas 5 horas fue el paseo para llegar a un arbol grande que era nuestro destino final. En el recorrido se verán tarántulas, sentir micos cerca y nunca verlos, ser picado por hormigas de todas los tamaños y colores, también de moscos y zancudos de toda variedad, oir las descripciones de cuanto árbol haya, con sus nombres, poderes curativos con la consiguiente receta hacen de este paseo uno bastante especial. Después del árbol 500 uno ya no sabrá los otros para que era que servían, pero igual se entretiene uno con todas las historias y recetas que bata cuenta.
Una vez llegados al rancho por la noche, a comer de afán que lo que sigue es ir a ver los jacares, nada diferenta a lo que ne colombia se llama caimán, pero a juzgar por el tamaño lo más posible es que lo que se vió eran simples babillas.
Nuestro guía sabe imitar el sonido que ellos hacen para atraerlos y una vez agarrados pasarlo para las respectivas fotos; esperenme que voy por otros dice, pero el motoneto que le da pesar de los animalitos los suelta una vez está la foto, así que todo se hace un jacaré a la vez~.
La devuelta, otra vez en canoa, esta vez a remo, una noche muy buena y a dormir sin luz, sin ver ni la palma de las manos y antes que la luz se fuera, ver las lindas arañotas que pasarán sobre nosotros una vez estemos dormidos en nuestras hamacas en un kiosco.
Obvio, despertar picado por las arañas, imagino pequeñas, porque las grandes son como para no darse cuenta cuando pican.
Paseo del día, ir a bañarse en un caño, llendo a este en canoa como no para despues del almuerzo volver a alter do chão, llegando en la noche para, después de unas cervecitas, acostarse a dormir.