Krakow. En español Cracovia, famosa ciudad polaca y único destino del país más desafortunado del mundo: Polonia, enclave entre Rusia y Alemania, quienes han pasado sin consideración sobre este país incontables veces. Esta Polonia me ha recibido de la mejor manera posible. Ya había descrito en el viaje a Suramérica las artes marciales argentina y brasileña de las que fui testigo. Pues ahora, sin esperarlo, resultó que Europa tiene sus propias categorías de lucha de exportación; en este caso la Lucha libre polaca.
Este bello arte exige, antes que todo, una hora adecuada. Ésta, como ya es sabido, debe ser en los primeros albores de la mañana, cuando las mentes de los espectadores están relajadas y prestas para nuevas experiencias sensoriales, pues es seguro que las primeras imágenes del día se graban mejor en la memoria. Ahora, ya teniendo la hora adecuada y un público con memoria fotográfica con el ISO más pertinente, procedemos a presentar a nuestros dos guerreros: En esta esquina, con uniforme oficial… no, dejemos así, dado que esquinas no hay. Antes que los luchadores se debe describir la arena donde este excelso arte se desarrollará. La lona, nombre suave para un duro terreno donde el luchador perdedor debe terminar, está elaborada de adoquines. Nuestro cuadrilátero no es cuadrado, diremos que es rectangular, ya que un lado está limitado por una calle, la cual pueden invadir los luchadores si así lo consideran pertinente. Al frente de ésta se encontrará un segundo límite en forma de muro, mas específicamente el de la estación de tren, el cual debido a lo doloroso del proceso, los luchadores deberán evitar sobrepasarlo; los otros dos lados restantes están libres para los luchadores pero estarán mas o menos acotados por espectadores con memoria fotográfica en su máxima sensibilidad.
Volvamos… en la metafórica esquina que en realidad es el lado izquierdo si se mira de estación a calle se encuentra, con uniforme oficial, cara de pereza y barra propia, a… no nos sabemos el nombre, lo llamaremos Pawel. En la otra metafórica esquina, la derecha si se mira la misma calle desde la misma estación, con pinta como si saliera de un bar a las seis de la mañana, esta… tampoco nos sabemos su nombre, lo llamaremos Piotr. Para quien no lo sepa Pawel es Pablo y Piotr, Pedro. Pawel es el luchador oficial por parte de la compañía férrea polaca y Piotr, el luchador oficial por parte de los beodos polacos.
La lucha polaca consiste en poner los nudillos de la mano en la cara de su oponente, al mismo tiempo debe evitar recibirlos. En este deporte, las piernas a parecer no tienen otro uso diferente al ser portadoras de equilibrio y balanceadoras de masa en caso de ser un receptor de nudillos. A diferencia del “hiiiiii” del karate, “chúpame las bolas” de los shedis argentinos y el “porra” brasileiro, acá entre lance y lance no se debe decir nada. Es muy posible que sea por educación, ya que las seis de la mañana no son horas para andar gritando, uno nunca sabe, pueden haber vecinos que quieran dormir un poco mas. La teoría del espectador recién bajado del tren, y quien relata las minucias de este recién descubierto arte marcial, es que aparte de educación para con los vecinos, es muy posible que ambos luchadores guarden silencio para evitar que la policía, muy dada en este tipo de actuaciones, trate de interrumpir sus expresiones artísticas, dejando el mundo artístico callejero sin esta representación de arte interactivo en vivo o para ponerle un nombre más acorde con los términos pomposos, una live performance.
La barra del luchador oficial de la compañía férrea no ayuda a su luchador, eso sería de lo mas injusto. No lo hacen porque respeten al representante de los beodos, no señor, es para que su luchador oficial no sienta ofendido su honor y capacidad. Si alguien se le ocurriera prestar una ayuda que no se ha pedido, una autoestima podría estar peligrando. Es por eso que la lucha dura un poco mas de lo previsto. Pawel, el de la compañía férrea, debe poner sus nudillos bastantes veces y recibirlos otras tantas hasta que Piotr, el representante de los pub, decide que ya está bien, esta sintiendo una resaca impresionante en su cara y no está para prolongar mas tiempo una performance artística marcial que ya ha sido apreciada en todo su esplendor por el selecto público.
Posible ganador por puntos, Pawel, no procede al knock out, sino que se voltea para recibir su chaqueta por parte de un miembro de su barra. No se comprende como debería celebrar la victoria. El silencio que demanda la hora ha sido respetado, así que, no muy claro ganador entra en la estación para lo que podrá ser la entrega de su turno. Por otro lado, no muy claro perdedor, volverá a su casa (si la encuentra) para recapacitar sobre el porque tiene dolores y colores varios en su rostro. Por último, testigo extranjero se va a darle varias vueltas a la estación para buscar a su amigo Damian que por algún lado estará esperándolo.
Ya mas despierto, testigo da una vuelta con su anfitrión por la ciudad bajo una lluvia que se describirá como insistente. El paseo, antes de concluir en un pub llamado Vodka, incluye la entrada a un castillo, Wawel, el cual sirve de escampadero para la cantidad de agua que cae en la ciudad.
Al otro día salgo con Radek, mi otro anfitrión, quien me hace un tour de iglesias y catedrales de la ciudad. Quienes no lo sepan, Krakow tiene en proporción, mas iglesias que Roma. Así, en solo el sector del centro, está la de los dominicos, benedictinos, las clarisas y un largo etcétera que no lo seguimos porque el narrador de religión y santos con iglesias propias poco sabe.
En Rynek Główny, siendo rynek mercado y glowny con sus acentos raros, plaza, nos encontramos, tal como lo indica su nombre, con una plaza grande que tiene un mercado en la mitad. En su pasado toda la plaza era un mercado pero con el tiempo, guerras, reinos, un largo paso de años y sucesos extraordinarios, quedó en lo que es hoy, una plaza grande con un mercado para turistas en la mitad. Abajo, se encuentran miles de años de historia y es por eso que, en las fundaciones de la plaza crearon un museo subterráneo con la historia de la ciudad. Aparte de las bases del mercado desde los años de upa, siendo upa algo entre el siglo VII y el XII, hasta los medievales y después cositas góticas y barrocas, se ven planos, maquetas de lo que fue la ciudad en todas estas épocas. En lo que parecen unas celdas hay unos videos documentales semi actuados, narrados por el historiador mas famoso de la ciudad, hágase el símil con el historiador egipcio que sale en cuanto documental de la pirámides exista. El protagonista principal de los documentales es la ciudad, el actor secundario es el historiador y hay un montón de extras disfrazados en todas las épocas desde reyes o princesas hasta aldeanos.
Después del museo vamos a un restaurante muy típico y famoso de la ciudad para comer platos polacos y nos encontramos con la foto del historiador en la columna de personajes Vip que visitan frecuentemente el restaurante. El señor, clasifica como famoso entonces. Que coincidencia, hace media hora veo un documental, y acá mientras me como las papas en receta polaca me lo encuentro en la columna Vip! Ve que coincidencia, hace media hora veo un documental, y acá mientras me como una carne en receta polaca, lo encuentro en la columna Vip y ahora lo tengo en la mesa del lado! Ja, no le pedí la foto, y ahora, pensándolo bien, hubiera quedado bien la foto de algún famoso conmigo en mi blog. Bueno, tengo la de mis dos anfitriones Damian y Radek, famosos y archiconocidos en sus respectivas familias y ahora con los lectores del blog!
Milenka, Radek, Yo y Damian
Nos vamos de paseo! Para dónde? Para el depresivo Oswecim. Y para que quiere ir al depresivo Oswiecim? Por es allí y solo allí donde queda el súper depresivo Auschwitz; nombre alemán para oswiecim, y famoso por ser el campo de concentración de todas las películas y vecino del verdaderamente terrorífico Birkenau, o para mayores señas, Auschwitz II, donde se encuentran los hornos crematorios, estación de tren, fosas comunes, paredones de fusilamiento y demás cosas que una persona en vacaciones no debe ver, pero… después de estar en el muy bien jalado museo del nazismo y del holocausto en Berlín, haber visto los desastres de los comunistas en Praga, pues era hora de ver en primera mano lo que los nazis hicieron con los judíos, gitanos, opositores políticos y toda desafortunada persona que se encontró con un malhumorado militar alemán en un mal día. La visita, bajo lluvia y bastante frío, consiste en entrar a los barracones del auschwitz I donde se encontrará, toneladas de pelo, ropa y demás ítems que por si solo no tendrían nada de malo hasta que le explican a uno como es que terminaron allí. De todo el día solo quedan tres fotos, no me provocó tomar mas que eso. Es de notar que después de la visita a este campo, distante a una hora de Krakow, queda uno necesitando un descansito o unas cervezas.
Yo por el contrario decidí irme a un partido del Barcelona contra el atlético para pensar en otra cosa (aunque con auschwitz o sin el habría visto el partido) y entre cerveza y cerveza llegó la hora de ir a dormir. Cansado estaba, sabía que al otro día tren nocturno tendría que tomar, así que dormir bien esta vez era una necesidad. Con una lapidaria frase Radek destrozo todos mis sueños de sueño… “La última noche en Krakow se debe pasar con vodka!” no me quedó en mi baúl de disculpas ninguna que se acomodase para discutir semejante verdad; diez años tratando de ir a esa ciudad y una vez allí voy a dormir la última noche? Nada que hacer, con pepinillos dulces o una sardina salada fue que pasaron un montón de vodkas hasta que… me desperté en un sofá. Como llegué allí? No me acuerdo muy bien, los fotogramas restantes de un video perdido dicen que en taxi; la billetera estaba vacía, lo que explica el uso de “montón” cuando me referí a los vodkas. En el intermedio hubo un kebab aunque no podría decir si bueno o malo fue. Lugares donde esos vodkas fueron servidos fueron muchos, personas con nombres que no puedo repetir conversaron conmigo, en que idioma, quiero creer que en inglés, aunque sería divertido que hubiese sido en polaco. Teorías políticas pasaron en el temario, letra pegada estilizo el discurso y zigzag la pose; del final no sabemos que pasó, porque todo comenzó en el principio… del siguiente día; cuando me desperté en un sofá con una imperiosa necesidad de tomar cuánta agua se pudiera porque más tarde un tren a Budapest debía tomar y el estado del héroe de este blog no parecía ser capaz de llegar hasta tan altas horas.
Wieża Ratuszowa, town hall tower, no sé traducir eso al español, el la plaza de mercado, Rynek Główny.
Castillo Wawel
Términal de Auschwitz II, la de todos los documentales
Auschwitz, el original
Torreta de vigilancia
Humor cínico… arbeit macht frei (el trabajo os hará libres)
León emo con rizos dorados y chocolís.
Sukiennice, el mercado de telas
Un cruzado que ya no me acuerdo como se llama
No se quien es pero me gusta su presentación en sociedad
Bazylika Mariacka, la basilica de la virgen maría o con su nombre completo, Kościół Wniebowzięcia Najświętszej Maryi Panny, iglesia de nuestra señora aparecida (o algo así)
Kościół św. Barbary, acá es más fácil la traducción: Kościół-Iglesia, święty-santo, Barbary-Bárbara, ahí lo tienen, iglesia de santa bárbara.
La misma basílica de maría pero desde afuera
La importante calle, grodzka
Juwenalia, la fiesta de los universitarios en la que el alcalde les estrega las llaves de la ciudad para que se emborrachen disfrazados con toda tranquilidad
Sukiennice, el mercado de telas por dentro. (ya no venden telas, solo souvenirs)
katedra wawelska, catedral de wawel, o como su nombre completo lo indica, królewska bazylika archikatedralna śś. Stanisława i Wacława na Wawelu, la de estanislavo y wenceslavo, o como sea que eso se escriba.
El castillo wawel por dentro y con mucha lluvia
Edificios en la Rynek Główny
Kościół św. Wojciecha, iglesia de san… aunque no lo crean Wojciecha es Adalberto.
Calle, si no estoy mal, en el ghetto de cracovia, Podgórze