Volviendo al tema del trekking esta vez volvemos a al cantón de Berna con los limites de Valais. Allí se ubica un pueblito llamado Kandersteg. Arriba del pueblo queda un lago llamado Öschinensee, ese es nuestro destino. Cómo todo trekking, aquí llamado wanderung, primero hay que tomar un tren. Este tren pasa por Berna, la capital, de ahí llega a Thun, a las orillas del lago que tiene el mismo nombre que es uno de Interlagos, (el que casi no se ve en las fotos del Rothorn), sin embargo no nos vamos tan lejos; a mitad del Thunersee (el lago), nos desviamos por un valle llamado Kandertal. (Thal es valle, Kander es un río/quebrada con ese nombre). El valle, como todo por estos lados, es bien bonito, rodeado de montañas nevadas arriba, los bosques en el medio y las vacas con sus campañas abajo. Por ahí pasa el tren, que sube zigzagueando por las montañas hasta que llega al Kandersteg (Kander, de la quebrada. Steg, vaya uno a saber que es). Kandersteg, es pequeño, turístico, aunque el turismo es más bien local y sobretodo familiar o joven, tipo boyscouts o algo así. A mi me tocó medio vacío – gracias a dios – así que feliz y dichoso – sin familias y sin niños – el ascenso comenzó por una calle del pueblo hasta llegar a una estación del teleférico. Si no lo había mencionado antes, pues lo hago ahora: es rara la montaña que no tenga su teleférico; en verano se usan por la vista que hay arriba, en invierno son para las pistas de esquí. En fin, desde la estación del teleférico en adelante el camino es en realidad un sendero que sube permanentemente siguiendo el curso de una quebrada llamada Öschibach, siendo bach, quebrada. Una vez arriba se llega a un lago completamente rodeado por montañas.
Pasada la tanda de fotos y el tiempo de descanso, el camino continúa por el lado del lago hasta llegar a un punto panorámico donde se ve el lago y las montañas que lo circundan. De ahí, el camino zigzaguea por el lado de una de las montañas hasta llegar a otra estación de teleférico en la que uno se monta para volver al pueblo.
El pueblo es bien bonito; tienesus restaurantes con comida típica suiza, rösti y cualquier cosa con queso fundido, así que no es que uno se queje; la comida es rica y como todo por acá, cara.
En resumen, el paseo toma unas 5 a 6 horas; en total se caminan 16 kilómetros y se suben 1200 metros.
El valle donde está Kandersteg
Un restaurante lo más de rico
Kandersteg
Kandersteg desde el camino
El camino en la parte asfaltada
El Öschinensee rodeado de montañas
El Öschinensee
Camino loma arriba
El lago desde arriba
La montaña de devuelta
Panorámica
El camino de subida desde el lago
El lago, la montaña y dos pinos
El lago, la montaña y dos pinos
El camino de devuelta
La estación de teleférico